Tiempo radical en JxC de Villa Gesell
Con el ingreso de las nuevas autoridades partidarias se abre una expectativa diferente para el tradicional partido
El radicalismo geselino mantuvo este martes su primera reunión abierta en la que confluyeron las nuevas autoridades ya en ejercicio, dirigentes, afiliados y simpatizantes en un número que puede denominarse como satisfactorio para estos «tiempos de seca» del partido fundado a finales del siglo XIX por Leandro Alem e Hipólito Yrigoyen, al mismo tiempo que a nivel nacional, su mesa de conducción, produjo hoy después de mucho tiempo, una más que interesante movida con el sello partidario en un mensaje hacia dentro de la coalición a la que pertenece y a la sociedad misma, al llevar al neuro científico Facundo Manes, a su sede central, con el motivo de celebrar su participación en una por ahora, eventual postulación a Diputado Nacional por la Provincia de Buenos Aires.
Para el radicalismo geselino, recuperar la llamada «reunión de los martes», no es solo recuperar una tradición, sino es ponerse en marcha con la impronta de una conducción que tiene dos prioridades urgentes: consolidar la unidad partidaria más allá de las diferencias y las aspiraciones propias que surgen de la participación política y mostrarse desde esa unidad, fuerte para la presentación de los candidatos que lo representarán en las elecciones PASO del mes de septiembre, para lo que tendrán tiempo hasta el 24 de julio próximo, fecha de plazo para la presentación de listas e inicio de la campaña con miras al 12 de septiembre, donde se dará la primera de las contiendas con el objetivo de seleccionar los candidatos para las elecciones generales de noviembre venidero.
Aquí, el radicalismo, en la voz y la acción de su nueva Presidenta, la arquitecta Eugenia Grinspun, ha indicado que la aspiración partidaria es la de presentar una lista de candidatos radicales en las PASO dentro del frente Juntos por el Cambio, donde también abrevan el PRO de Mauricio Macri y de Rodríguez Larreta, hoy más divididos que juntos en especial en el territorio bonaerense, y los peronistas Miguel Angel Pichetto y Emilio Monzó, que si algo faltaba para tirar la cuerda, hoy sostuvo que tiene intenciones de ser el próximo candidato a gobernador bonaerense por ese frente en 2023.
Sabido es que a los radicales de cuño, no les simpatiza la inclinación hacia la derecha en la que fueron llevados a partir de decisiones políticas que han dado pésimo resultado al partido y que muchos añoran la vuelta a aquellos tiempos de boinas blancas y marchas radicales al convite de «¡Adelante radicales!, y por ardua que sea la tarea, tienen muchos de ellos, la vocación de esa lucha.
La unidad es quizá el factor más importante hoy en día a la hora de estas definiciones. Si se consolida y los ideales partidarios ocupan el centro de la escena, el radicalismo podrá llegar a formular una lista de candidatos propios con fuertes posibilidades de imponerse en el armado interno de JxC y encarar una campaña con un discurso más afín a su historia y sus compromisos con los sectores democráticos y populares de la comunidad, con una visión de lo nacional donde estos valores estén por encima de los valores del libre mercado, la desaparición del estado y el ahogamiento de la industria nacional, tan propios del neo liberalismo encarnado por el PRO en cualquiera de sus variantes.
No se puede dejar de señalar a esta altura, lo importante que ha sido que la figura de la arquitecta Grinspun, con un desempeño muy elogiado por propios y ajenos en el Concejo Deliberante de la anterior conformación, la haya convertido en la prenda de la unidad y la catapulte a la conducción partidaria, desde donde viene dando la batalla por la recuperación radical a brazo partido, sin que por ello pueda decirse que tiene el terreno llano, muy por el contrario, pese a la unidad, la política está hecha por políticos y políticas y sus vanidades, que muchas veces entorpecen procesos de cambios, de transformaciones más allá de lo necesario que sean.
Por otro lado, que la conducción nacional haya sentado hoy en la mesa nacional a Facundo Manes con el objetivo que pueda convertirse en la cabeza de la lista de diputados nacionales en la provincia de Buenos Aires, es un paso gigante para un partido que hasta ayer mismo, no tenía candidatos y solo se limitaba a mirar, como sus «socios» del PRO, dirimían hoy por los medios de comunicación, espacios de poder en un «ninguneo» que el radical más tibio no puede soportar.
Manes, si se decide a aceptar esa postulación, tiene casi garantizado ser la cabeza la lista bonaerense, ya que no hay candidatos de fuste que puedan emparejar su figura, lejana hoy por hoy de la actividad partidaria, pero con vocación política y un enorme reconocimiento personal y científico en la sociedad.