25 de mayo: Una celebración que no pudo frustrar la lluvia
El clima fue determinante para suspender el desfile comunitario, pero la fiesta popular se realizó en el Polideportivo Municipal
Fue una verdadera pena que el desfile no se pudiera realizar porque a la hora en que estaba programado una intensa lluvia se derramaba sobre la ciudad. Todo ese trabajo realizado en los días previos para organizar la caminata de alrededor de 80 instituciones comunitarias por el Boulevard Silvio Gesell, no se concretó.
Hubo cierta desazón de los geselinos cuando la mañana del día patrio amaneció con nubarrones, poco viento y gotas de lluvia que se insinuaban. Los organizadores del evento previeron la situación la noche del 24 cuando la responsable de la Dirección de Protocolo, Ana Gussoni adelantó que, en el caso de lluvias, el desfile se suspendía, pero la fiesta del “pueblo” se hacia en las instalaciones del Polideportivo.
La consigna que instalo la Municipalidad para la fiesta patria fue “ Un gran país se logra con un pueblo unido” y fue la idea la que primo en las palabras del intendente Gustavo Barrera en la apertura del acto cuando invitó a los vecinos a “Trabajar todos juntos, nuestros niños, nuestras escuelas, pensando siempre en defender nuestro pueblo, por eso la consigna es no perder nuestro horizonte, hay una sola patria, la que defiende la educación, la salud pública, los trabajadores, viva la patria”.
En el campo de atletismo quedaron los stands armados y solitarios que se prepararon para una gran fiesta popular. No obstante, cuando la lluvia lo permitió el stand de los “gauchos geselinos” comenzó a hacer circular los exquisitos “choripanes” y otros manjares.
El pericón es la danza nacional. Se trata de un baile típico de la llanura pampeana. Es una danza muy elegante y en sus inicios fue denominado «baile de cuatro», porque es el mínimo de parejas necesarias y, también, porque la coreografía de la danza primitiva se componía solamente de cuatro figuras: demanda o espejo, postrera o alegre, cadena y cielo. Fue llevado a Chile por el Ejercito de los Andes de San Martín, en la campaña de liberación del continente americano.
Cuando se baila en estas fiestas geselinas queda demostrada la destreza de los bailarines telúricos de nuestra ciudad.
Las fiestas populares están arraigadas en comunidades como la nuestra, son la expresión de más templada de la vida en comunidad. Vecinos que saben atender a sus congéneres y estos que consumen los que los otros elaboran y así ponen a rodar la incipiente economía de un pueblo solidario en un país en crisis. Estas las fiestas del pueblo se hacen para sus habitantes.
La fecha patria, especialmente esta, más allá de las interpretaciones de historiadores, políticos y periodistas, se siente más profundamente que otras que tiene la Argentina. Es porque fue la primera acción rebelde de un pueblo, contra la opresión del colonizador español que limitaba la libertad de pensar de los habitantes. Los defensores del comercio libre de le época fueron una razón más que importante para liberar a esta sociedad que estaba a punto de ser parida. Pero de aquella revolución surgieron hombres, los nuestros, los que veneramos en los billetes nuevos, con pensamiento libre que forjaron nuestra identidad nacional.