CulturaP. Villa GesellSociedad

John Lennon cumpliría este sábado 81 años

Nació el 9 de octubre de 1940

Mientras escribo este recordatorio escucho “All you Need Love” que fue un himno de la juventud en 1967 y fue la canción que escribió Lennon para la primera transmisión de la televisión satelital intercontinental que se realizó ese año para 30 países y vista por más de 400 millones de personas el día 25 de junio de 1967.

Era el verano del amor, los hippies reinaban, junto a la realeza británica en una Gran Bretaña que amaba a esa banda que cambió para siempre la cabeza de los jóvenes con canciones que mezclaban el amor libre y atravesaban el sistema.

John nació el 9 de octubre de 1940 en el puerto de Liverpool, su madre Julia Stanley dio a luz a John en el segundo piso del Hospital Maternal Oxford Street de Liverpool. Esa noche, las bombas de la Luftwaffe (Wehrmacht) caían sobre la ciudad y no había más luz que los destellos de las explosiones. Para salvar la vida del bebé, las mujeres de la casa le cubrieron con sus cuerpos. Se llamó John, por su abuelo paterno, y Winston por puro patriotismo, en honor al primer ministro Winston Churchill. Su infancia transcurrió entre escombros de ciudades inglesas destruidas. Fue un niño confrontativo, sagaz e irónico y amado, precisamente por esas condiciones.

“Julia era distinta a cualquier mujer de la época. Alegre, activa y con un característico sentido del humor. La relación con John no fue nunca común a otros niños de la época que cabalgan a lomos de la madre como si fuesen bonobos (chimpancé). Sin embargo, la unión de Julia con su hijo, aunque singular, resultó algo mágico, tanto que el primer acorde de la banda musical más carismática de la historia sonó en sus manos mucho antes de que naciesen los Beatles. Julia era extravagante, imprudente, libre, desenfrenada, caótica… pero mantenía una serenidad a prueba de bomba cuando se sentaba junto al pequeño John para revelarle el universo de la música. John conoció la música por Julia”.  

Fue un joven iracundo, intolerante y extremadamente inteligente, era esa perspicaz capacidad para crear que lo convirtió en un líder natural. La trágica muerte de su amada madre, lo marcó para siempre. John tenía 17 años y había encontrado a la verdadera Julia, cuando falleció atropellada por un Bus.   

Su pérdida lo acercó a Paul McCartney, que también había perdido a la suya un año antes.

El dolor de ambos apareció en su música. Era su forma de llorar y lo hacían juntos. Juntos crearon las más hermosas melodías que se recuerden y que hoy están más vigentes que nunca. Los jóvenes de aquellos años envejecemos con eso hermosos recuerdos de aquellos años.   

«La primera melodía que aprendí a tocar fue ‘That’ll Be The Day’, dijo John alguna vez. Su madre se la enseño en el banjo, sentada junto a él con una paciencia infinita hasta que logró trabajar todos los acordes. Hay pocas imágenes de aquella época”.

Julia solía cantar y bailar rock con su hijo en la cocina de la casa que compartía con una pareja que no quería a John. Escuchaban a Buddy Holly en la radio.      

“La imaginamos junto a su hijo tratando de emular el clásico de Buddy Holly rasgando, una por una, las cuerdas de ese banjo elevado a leyenda por ser el primer instrumento de la estrella más grande del rock and roll. Era un regalo de su padre, abuelo de John, y con él el artista tuvo la fortuna de descubrir su inconfundible sonido”, revista Rolling Stone – 1980.

John creció, rápidamente se convirtió en un músico extraordinario, creo a los Beatles se convirtió en un músico genial, su música y su personalidad extravagante despertaron fanatismo entre sus seguidores. Fue también un hombre comprometido con su época, atravesó su juventud en las convulsionadas décadas de los sesenta con los Beatles, y con su creatividad a pleno en los setenta, solista y militando por la paz mundial. Fue un hombre adelantado con sus ideas y practicas sobre las drogas, fundamentalmente la marihuana para la apertura de la mente, las guerras, la mujer, el sexo y la psicología, fue uno de los primeros en someterse a la extraña terapia del grito.

Hay canciones, todas son bellas, que expresan su dolor. En “Mother”, por ejemplo, es un lamento armónico que habla de su madre. En “Imagene” expresa un amor puro y natural por un sueño utópico.

Hoy a 81 años de su nacimiento a mí me pega de una manera muy interior, me crie con su música, escuche a los Beatles a los 9 años y hoy con 67 años los escucho, como ahora, en que escribo esta nota. Su muerte determino que su imagen perdure joven por siempre, con 40 años, con su bella delgadez y con Yoko de su lado.  Lo mismo pasa con George Harrison que murió a los 58 años de cáncer. Pero su imagen es triste y deteriorada por la enfermedad. Paul y Ringo envejecen, son ancianos millonarios y vigentes, próceres de la música mundial. Feliz cumpleaños John, te amo                                       

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba